El ácido fólico convencional, que se sigue utilizando en muchos complementos alimenticios, es un producto artificial y sintético que no se encuentra en esta forma en la naturaleza y no puede ser utilizado directamente por el organismo. Muchos fabricantes ofrecen suplementos de folato con L-metilfolato activo de gran pureza, pero esto no supone una mayor absorción del ácido fólico. El L-metilfolato activo siempre está unido a una sal, cuya forma y calidad desempeñan un papel decisivo en la biodisponibilidad del folato activo. Para obtener la máxima biodisponibilidad, no solo hemos prestado atención a la máxima pureza al seleccionar nuestro principio activo, sino también a componentes activos decisivos como la forma cristalina de la sal, la concentración y la estabilidad del L-metilfolato activo.
Quatrefolic® es un principio activo patentado en el que el metilfolato está unido a la glucosamina para estabilizarlo y garantizar una conservación y eficacia óptimas. La glucosamina es un componente preciado y natural de diversos tejidos corporales y, por tanto, un beneficio adicional. Quatrefolic® se caracteriza por una biodisponibilidad sin precedentes y puede ser utilizado directamente por el organismo. Debido a su extrema pureza, alta estabilidad y extraordinaria biodisponibilidad, Quatrefolic® es una de las dos formas de L-metilfolato de mayor calidad y eficacia.
Muchos principios activos del mercado contienen también una mezcla de L-metilfolato activo con la variante geométrica R-metilfolato, que no puede ser utilizada por el organismo. Las formas convencionales de metilfolato pueden contener hasta un 50 % de esta variante ineficaz y reducir así considerablemente la ya compleja y difícil absorción del ácido fólico, por lo que solo se puede absorber un máximo del 38 % en el primer paso. Magnafolate® Pro combina la máxima pureza, bioactividad y estabilidad para una absorción ideal del ácido fólico de difícil absorción.
El único otro ingrediente que utilizamos como agente de carga puramente natural es fibra de acacia de primera calidad, cultivada sin pesticidas. En lugar del agente de carga sintético habitual de celulosa microcristalina con nanopartículas, utilizamos un alimento natural rico en fibra. La fibra soluble de la fibra de acacia se tolera muy bien y sirve como fuente de alimento para las bifidobacterias y lactobacterias del intestino. Nuestra fibra de acacia procede de un cultivo inocuo para el medioambiente, sostenible, respetuoso con los recursos y de comercio justo.
El recubrimiento especial de las cápsulas es de HPMC, que, a diferencia de la mayoría de las cápsulas de HPMC o pululano del mercado, no contiene excipientes como carragenanos y PEG, que no están sujetos a declaración. En lugar de plástico, para los envases utilizamos vidrio ámbar, que protege de la luz y es respetuoso con el medioambiente.